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Ignacio Bruzzone - Villa olímpica de la juventud

J. G. Ballard: la imaginación al servicio de unas cuantas ideas inquietantes

Instituto del Desarrollo Humano, UNGS

Quizás hace unos cien años la gente tenía en sus mentes una clara distinción entre la realidad exterior […] y el mundo de las ensoñaciones diurnas […]. Esa relación se ha invertido totalmente, de modo que hoy los mayores productos de ficción están en la realidad exterior; son los materiales de la vida diaria.    
J. G. Ballard

Entre fines de los años ochenta y mediados de los noventa, el nombre de J. G. Ballard (1930-2009) fue haciéndose conocido para el gran público gracias al cine, que con El imperio del sol y Crash (filmes dirigidos por Spielberg y Cronenberg, respectivamente) le dio un espaldarazo a su obra. Esa visibilidad ayudó a que sus libros fueran apreciados por la prensa y requeridos por tandas de nuevos lectores que no buscaban en ellos la ciencia ficción de sus primeros cuentos y novelas, ni la narrativa experimental de La exhibición de atrocidades que había maravillado a Susan Sontag a comienzos de los setenta. 

El recorrido que Pablo Capanna propone en Ballard. El tiempo desolado nos deja comprender que los elementos con que este escritor construía sus ficciones cobran mayor significación si, además de reparar en los rasgos que se repiten dentro de su obra como patrones de un diseño, observamos los contrastes que surgen al superponerlos a situaciones de su vida personal y a los sucesos de su época. Por ejemplo, el descarriado erotismo sin afecto de Crash (novela en la que los personajes se entregan a la excitación que les causan los accidentes automovilísticos) fue una especie de intento por “apaciguar a la muerte” (Ballard, 2008: 241). Unos años antes, su esposa Mary había muerto repentinamente a causa de una fulminante enfermedad. Por otro lado, el automóvil (como símbolo que condensa tecnofilia y lujo consumista: muestras de la decadencia de Occidente) aparece con un rol central en “El asesinato de J. F. Kennedy considerado como una carrera de automóviles cuesta abajo”, áspera pieza de humor negro que forma parte de La exhibición de atrocidades, libro que —como Crash— provocó rechazos a uno y otro lado del Atlántico. 

Capanna Ballard El tiempo desolado

Ballard. El tiempo desolado es la versión revisada y corregida de un texto que se publicó anteriormente en tres ocasiones (1991, 1993 y 2009), primero como una serie de artículos y después como libro. Y si es indudable que este ensayo constituye un aporte que toda biblioteca ávida de ciencia ficción recibiría con gusto, lxs lectorxs curiosxs sobre el género podrán descubrir que lo ballardiano (el adjetivo ballardian ya figura en el Diccionario Collins) no nos habla precisamente de platos voladores, robots, extraterrestres ni viajes espaciales. Capanna señala que el famoso manifiesto acerca del “espacio interior” que Ballard escribió en 1962, cuando su literatura comenzaba a alejarse de la New Wave (variante de la ciencia ficción que acrecentó la libertad artística en desmedro de la verosimilitud científica), no logró crear un movimiento ni un grupo literarios. No obstante, le sirvió como programa para su propia narrativa. Muchas de las ficciones de Ballard tienen dejos surrealistas u oníricos, pero no fantasean en el vacío: no forjan ambientes catastróficos o personajes psicopáticos que cautiven o intimiden porque sí. Lo que sucede es que, en términos de Ballard, la realidad exterior se ha estado mimetizando con las ficciones y con las ensoñaciones de la mente humana: al hombre contemporáneo le cuesta cada vez más distinguir los sucesos auténticos de aquellos que son escenificados o actuados. Alguien podría reflexionar que la tecnología (tengamos en cuenta internet y las redes sociales, las teorías conspirativas, las fake news y el terraplanismo) quizá sea un refinadísimo dispositivo que la humanidad usa para soñar despierta. Y hay un corolario, de acuerdo con Capanna: es la sociedad planetaria la que con el paso de los años se fue haciendo más y más… ballardiana.

Algunxs lectorxs recordarán previas contribuciones de Pablo Capanna al mundo de la ciencia ficción, género en el que es un referente destacado en lengua castellana (quizás el principal, según sugería en 2009 el español Domingo Santos). En ese sentido, aquellos ensayos que exploran las vidas y las obras de escritores fascinantes como Cordwainer Smith (El señor de la tarde, 1984) y Philip K. Dick (Idios kosmos, 1995) conjugan una serie de características que también están presentes en El tiempo desolado. Como en esos libros, en este último Capanna no sólo ahonda en la compleja personalidad de un autor cuya imaginación literaria parece capaz de soñar por toda la comunidad: también reflexiona sobre los hipotéticos vínculos entre la experiencia personal (intransferible, irrepetible) y los mecanismos de la creación. Todo esto, con una prosa que nos da la ilusión de que análisis y síntesis son funciones que suceden naturalmente en los textos.

Escrito de manera magistral —aquí coincidimos otra vez con Santos— y también muy amena, Ballard. El tiempo desolado es el resultado de una mirada que no por minuciosa deja de ser abarcadora. No basta con realizar una investigación profunda, ni con establecer conexiones perspicaces entre el contexto social, el momento histórico, y la obra y las vivencias del autor, si un lenguaje poco accesible frena o expulsa al lector no especializado, al curioso que da sus primeros pasos en el mundo de los libros y la cultura. No basta con producir un texto bien documentado que entusiasme al lector conocedor de lo ballardiano, si se pierde el foco para divagar. 

Desde ya, Capanna logra todos esos objetivos deseables y elude con solvencia esos posibles escollos (el breve encuadre filosófico del primer apartado es sencillamente extraordinario) para ofrecer un texto que interesará tanto a aficionadxs como a neófitxs. Por añadidura —mientras interroga a los personajes de Ballard y estudia con lupa las escenas de sus ficciones como quien examina un cuadro de Dalí—, nos plantea preguntas inquietantes acerca del rumbo de la civilización en la segunda década del siglo XXI. 

Por todo esto es que invitamos a leer Ballard. El tiempo desolado, de Pablo Capanna.

Bibliografía citada

BALLARD, J. G. (2008) Miracles of Life. An Autobiography. Londres: Harper Perennial.

CAPANNA, P. (2019) Ballard. El tiempo desolado. Buenos Aires: Letra Sudaca.

SANTOS, D. (2009) “J. G. Ballard: El tiempo desolado, de Pablo Capanna”, BEM On Line, 23 de septiembre de 2009, <https://bemonline.wordpress.com/2009/09/23/j-g-ballard-el-tiempo-desolado-de-pablo-capanna/>, [01/08/2021]

SONTAG, S. et al “Voces sobre J. G. B.”, Página/12, 26 de abril de 2009, <https://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/subnotas/5248-899-2009-04-26.html>, [02/08/2021]